RECOMENDACIONES PARA TENER SUEÑOS LÚCIDOS

SUEÑOS LUCIDOS: Arquitectos de nuestros sueños.

Hay un momento mágico e inigualable, y es aquel en el que -dentro de un sueño – descubrimos que estamos soñando. Miramos a nuestro alrededor, y encontramos un mundo que parece tan real como la realidad, pero que sabemos que sólo sucede en nuestra mente. Entonces nos damos cuenta de que las reglas allí las ponemos nosotros mismos, los peligros no son tales, no existen limitaciones. Somos realmente poderosos, podemos tomar decisiones concientemente, y manipular nuestro sueño para llegar adonde sea. Somos los arquitectos de nuetros sueños. La emoción nos desborda, las posibilidades son infinitas: hemos entrado en un Sueño Lúcido.

Un sueño lúcido es un sueño en el cual el soñador es consciente de estar soñando. Este tipo de sueño se puede dar de forma espontánea o bien ser inducido por determinadas prácticas y ejercicios.

Es probable que la mayoría de las personas hayan tenido uno o más sueños lúcidos en algún momento de su vida, aunque la mayoría de las veces hayan sido olvidados al igual que los sueños comunes. Hay personas que se ejercitan para tenerlos y llegar a controlarlos de diferentes maneras ya que durante el sueño lúcido existen diferentes niveles de control del sueño.

Pierre-Cécile Puvis de Chavannes, El Sueño.

Los soñadores más experimentados pueden llegar a controlar sus sueños a voluntad sin ninguna dificultad, dirigiendo el sueño y llevando a cabo sus deseos en los mismos. Entre las habilidades posibles para un soñador experimentado, están el poder cambiar el lugar donde se encuentra en el sueño, visitar sitios conocidos o imaginarios, volar, cambiar de forma, y cualquier cosa que se le ocurra durante el sueño.
Los sueños lúcidos son notables por perdurar en la memoria, siendo excepcionalmente mejor recordados que los sueños típicos y no lúcidos (aunque también es posible no recordarlos).
Los onironautas describen regularmente sus sueños como excitantes, fantásticos, llenos de color (se observan los colores mejor que en la misma realidad).
Además, incluso han informado de sueños lúcidos que han tenido lugar en una especie dehiperrealidad, una realidad que se siente más real que el estado cotidiano de vigilia.
En estos sueños todos los elementos del sueño están amplificados, por lo que a menudo comparan sus sueños con experiencias espirituales.

La posibilidad de obtener conciencia dentro de un sueño es una oportunidad increíble para honrar no sólo el espíritu lúdico –pues te permite, por ejemplo, volar a voluntad–, sino que representa una herramienta poco usual y muy efectiva en el autoconocimiento, además de poseer notables propiedades psicoterapéuticas.

Si en los sueños los elementos son símbolos, y representan sentimientos, episodios de nuestra historia individual, deseos silenciados y otras manifestaciones puntuales de la psique, entonces interactuar conscientemente con ellos se traduce en un frugal instrumento de desarrollo personal.

Existen múltiples estudios alrededor de las posibilidades terapéuticas de los sueños lúcidos.

Por ejemplo, pueden ser una especie de espacio de entrenamiento para luego, ‘despierto’, resolver problemas prácticos.

Otros advierten sobre la posibilidad de ejercitar el cuerpo y la mente durante estos momentos, incluso se habla del “yoga de los sueños“, y en general se enfatizan las propiedades curativas de esta práctica.

Pero una vez que estamos convencidos de las bondades de esta ‘tecnología onírica’, o que al menos nos intriga la posibilidad de experimentarla, nos encontramos ante una puntual interrogante:
¿cómo obtener lucidez durante un sueño?

Muchas personas acceden involuntariamente a episodios lúcidos durante sus sueños, pero la mayoría no.

Sin embargo, existen ciertas técnicas o medidas que se pueden adoptar para facilitar estas experiencias –aquí vale la pena remarcar que un ingrediente esencial en esta aventura es la paciencia.

CONSEJOS A SEGUIR:

Un diario de sueños:

anotar diariamente al menos fragmentos o escenas de los sueños que recuerdas ayuda a “poner el tema sobre la mesa”, asignándole atención a tu flujo de sueños dentro de tu mapa mental.

Predisposición: 

una labor esencial para esta o cualquier otra cosa que te propongas, se refiere a una dosis de autoprogramación mental para lograrlo.

Constataciones de la realidad: 

a lo largo de tu día, unas ocho o diez veces, pregúntate si estás dormido y trata de confirmarlo con alguna prueba física, por ejemplo tratar de traspasar un muro con tu mano. Esto te permitirá contrastar el estado ‘real’ a cuando estés dormido (si logras atravesar el muro es muy probable que estés soñando).

Familiarización: 

familiarízate con tus sueños, con símbolos recurrentes e interpretaciones posibles. Detecta tus propios patrones oníricos.

Alucinación hipnogógica:

¿has notado que justo antes de dormirte tu flujo de pensamientos comienza a flexibilizarse y hay un breve periodo en el que el razonamiento que aún aplica denota una elasticidad irracional? Es importante poner atención a estos momentos que de algún modo representan una delgada frontera entre estar despierto y estar dormido.

Desintoxícate: 

la presencia de toxinas muchas veces entorpece la práctica onírica. Por ejemplo, el consumo de drpgas o de alcohol difícilmente ayudará a alcanzar tu propósito.

Sueño plácido: 

si tienes desórdenes de sueño, como insomnio, es fundamental que los combatas. Asegurarte un sueño plácido es importante para luego comenzar a moldearlo.

Aléjate del estrés: 

aunque para muchos está parecerá misión imposible, al menos es importante entrar al sueño lo más relajado posible. Una meditación de 10 minutos podría ser suficiente para lograrlo.

Despierta periódicamente: 

aunque podría sonar como una terapia de shock, se ha comprobado que el despertarte cada cierto tiempo, por ejemplo cada 90 minutos, ayuda a avivar tu sueños.

Los sueños lúcidos siguen siendo, para muchos, una especie de seductor mito; pero lo cierto es que con un poco de dedicación son fácilmente accesibles.

La responsabilidad comienza en sueños.

-W..B. Yeats

Fuente: http://nodejardeleer.blogspot.com.es/2015/04/recomendaciones-para-tener-suenos.html